Finalistas. Asociados con la Arq. Elisa Giusti y el Arq. Juan Caycho.
El encargo explícito es complejo: resolver en un edificio usos muy distintos en cuanto a tipo de actividad, intensidad de uso y control de acceso y hacerlo de manera muy eficiente en el manejo del espacio.
El encargo implícito es consolidar el bloque de Humanidades, dotarlo de identidad y que establezca una relación armónica con la Vereda Principal y el Núcleo Central del campus.
Después de estudiar la manera en que se organizan los distintos grupos de edificaciones en el campus de la PUCP, y viendo el Plan Maestro que se propone, nos ha interesado continuar utilizando la tipología de patio o claustro para organizar a su alrededor los espacios dedicados al estudio y la concentración. Originalmente pensado como un espacio reflexivo, de índole monástica, se extendió por centros educativos desde la Edad Media, por lo cual no es casual que se denomine también claustro a un grupo de docentes y a sus reuniones.
Así, tenemos tres patios: El Patio de Humanidades, el Patio de Arqueología y el Patio de Profesores. Los primeros dos, de carácter más introspectivo y de menor afluencia están ubicados donde estaba el original Patio de Humanidades, conservando las mismas proporciones del espacio y todos los árboles mayores. El Patio de Arqueología se ubica en un primer sótano, rompiendo la continuidad con el patio existente para producir la necesaria división entre el trabajo de los arqueólogos y la de los profesores de humanidades al no tener una relación visual directa entre ellos. Está en un nivel más arriba de lo establecido en las bases con el fin de garantizar la iluminación natural suficiente para los laboratorios de arqueología.
El Patio de Profesores, destinado a todos los profesores de la universidad, en cambio, supondría una violenta irrupción de actividad y por lo tanto ha sido ubicado en los jardines exteriores, del otro lado del Auditorio de Humanidades que, dado su tamaño y masa, sirve como una pieza divisoria entre un mundo y otro. Este patio articula todas las actividades de los profesores en dos pisos: salas de reunión, conferencias, oficinas temporales, áreas de asesoría y servicios.
El Nuevo Edificio de Humanidades es un volumen de geometría clara que se ubica entre los patios y la vereda principal del campus con el fin de poder regular los accesos y distribuir las circulaciones a los distintos usos. Las actividades abiertas al público en general son accesibles en el primer piso desde un paseo exterior cubierto que corre paralelo a la vereda principal. Desde ahí también se accede a la escalera helicoidal exterior que lleva al comedor, que es un mirador excepcional del paisaje y la actividad del Nodo Central, y que fuera del horario de almuerzo podrá servir como un lugar de estudio y encuentro para toda la comunidad. La misma escalera, que es muy ancha hacia el comedor, para manejar el volumen necesario de gente, se reduce para descender hacia los sótanos del Patio de Profesores, en un gesto escultórico que anima este espacio.
Desde la recepción central, en el primer piso, se accede por ascensor a las recepciones formales de cada piso. También existe una ruta alterna para el uso diario de los profesores que les permite recorrer a pie los pocos pisos de oficinas desde una escalera interior ubicada en la esquina hacia el bloque de estudios generales.
Colaboradores:
Arq.Gary Leggett, Paola Salvatierra, Alex Alberca, Katherine Chavarry, Cristal Gordillo.
2018
5,061 m2
San Miguel, Lima.